El Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático es una organización intergubernamental de las Naciones Unidas cuya misión es proveer al mundo con una opinión objetiva y científica sobre el cambio climático, sus impactos y riesgos naturales, políticos y económicos y las opciones de respuesta posibles.
En los últimos años, han elaborado 3 informes de grupos de trabajo (el primero sobre bases físicas del cambio climático; el segundo, vinculado a la adaptación y la vulnerabilidad; y el tercero, a la mitigación) y 3 informes especiales (sobre el calentamiento global de 1,5°C, el cambio climático y tierra, y el océano y la criosfera en un clima cambiante).
El Informe de Síntesis del Sexto Informe (AR6) es fundamental para acelerar la acción climática al estudiar el fenómeno del cambio climático, sus impactos y facilitar la transmisión de esta información. No obstante, el gran reto de este informe no es científico, sino político.
Según el IPCC, estamos en el límite para evitar que el aumento de la temperatura global del planeta sobrepase el 1,5ºC de temperatura antes de fin de siglo y para frenar los impactos más peligrosos para las comunidades más vulnerables. El AR6 destaca que esta situación es el resultado de un “fracaso colectivo para reducir los gases de efecto invernadero (GEI)” y confirma que, aunque reduzcamos las emisiones rápidamente, necesitaremos al menos 20 años para ver los efectos de esta transición hacia un mundo sostenible.
No obstante, el IPCC ofrece un espacio a la esperanza y proporciona una advertencia para los/as tomadores/as de decisiones y la sociedad en su globalidad. Ahora, más que nunca, necesitamos voluntad política, apoyo público y motivación personal para respetar el límite de 1,5 ºC.
El documento es una guía para una sociedad cada vez más concienciada ante el problema climático y que demanda soluciones, pero se necesita más apoyo a la hora de acelerar las transformaciones. También va a ser un elemento crucial para el desarrollo de la próxima cumbre del clima, COP28, y para el Primer Reporte Global sobre la implementación del Acuerdo de París, en 2023.
El AR6 es interesante porque, en comparación con otros informes, su análisis integra de una manera más concreta un enfoque humano sobre el cambio climático en sus impactos y sus soluciones. Por este motivo, se centra en identificar soluciones más concretas y en mostrar los co-beneficios para la sociedad, superando el ámbito ambiental.
En el informe se expone la necesidad de apalancar entre 3 y 6 veces más financiación para la acción climática, subrayando la importancia de cerrar la brecha entre los presupuestos disponibles y las necesidades para hacer frente al impacto del cambio climático. No solo se trata de la cantidad de financiación, sino también de cómo y dónde se asignan esos fondos. Para hacer frente a este problema, la financiación debe ser más fluida. En este contexto, el sistema financiero tiene que responder a la urgencia climática con más inversiones y la integración de análisis de riesgos. En paralelo, los gobiernos también son fundamentales para desarrollar presupuestos climáticos, incentivando con las cuentas públicas los cambios necesarios para la descarbonización y asegurar la cobertura de las necesidades de los colectivos más vulnerables.
El informe también aborda la respuesta a un debate en el seno de la acción climática sobre la necesidad de centrarse en las medidas de mitigación o en las actividades de adaptación. Se concluye afirmando que necesitamos ambas, adaptación y mitigación, ya que requieren un mismo enfoque de acción y no se pueden separar. Se indica que la adaptación no es infinita, mostrando que sin mitigación solo llegaremos a la obsolescencia de las medidas de adaptación actuales.
En definitiva, debemos primar la confianza, la colaboración, el reparto de responsabilidades y cargas que nos exigen diferentes actuaciones, compromisos y oportunidades, con el objetivo de reducir las emisiones y obtener mayores beneficios para la sociedad.
Debemos actuar ya, y poner a disposición de la acción climática la tecnología y los conocimientos que ya tenemos operativos. Debemos pasar de la dilación climática a la activación climática.
¡No te rindas e impulsa la acción climática en tu entidad!